La décima edición del Día de la ICE, consagrada a la Iniciativa Ciudadana Europea, se celebró excepcionalmente en línea y duró dos jornadas. La presidenta del CESE Christa Schweng, la vicepresidenta de la Comisión Europea Věra Jourová y el vicepresidente del Parlamento Europeo Pedro Silva Pereira han evaluado la situación de este instrumento único de democracia participativa.

En sus observaciones preliminares, Christa Schweng subrayó que una característica clave de cualquier proceso participativo es su impacto: «La falta de impacto puede generar desencanto, descontento y frustración entre los ciudadanos». A lo que añadió: «Solo si aumentamos su impacto la ICE se convertirá en un instrumento sólido capaz de reconectar a la UE con sus ciudadanos».

Desde 2012, tan solo seis iniciativas han conseguido superar el umbral de firmas necesarias y su impacto ha sido bastante limitado y ha tardado en producirse. Sin embargo, hay motivos para el optimismo, ya que en 2021 entraron en vigor los dos primeros actos legislativos inspirados por una ICE: la Directiva relativa a la calidad de las aguas destinadas al consumo humano, influida por la iniciativa Right2Water, y el denominado Reglamento sobre transparencia, resultado de la iniciativa Prohibición del glifosato.

En su mensaje de vídeo, la Sra. Jourová llamó la atención sobre los cambios y mejoras introducidos por el nuevo Reglamento sobre la Iniciativa Ciudadana Europea, que entró en vigor en enero de 2020. A continuación explicó que el impacto real de las iniciativas ciudadanas europeas va más allá del mero seguimiento legislativo: «Incluso las iniciativas que no llegan a las etapas formales finales del proceso también pueden generar múltiples impactos». Y afirmó: «Desde el inicio de una ICE, los ciudadanos llevan al espacio público el tema que les preocupa. Y esto impulsa la sensibilización y genera efectos».

El Sr. Silva Pereira aseveró que el Parlamento Europeo sigue liderando el debate sobre cómo concienciar respecto de la ICE y mejorar su funcionamiento: «Es importante garantizar que, si una iniciativa consigue llegar a la fase final, se tome en serio y se aborde adecuadamente». (na)