En el contexto de la cumbre del Consejo Europeo, el Comité Económico y Social Europeo ha adoptado hoy una Resolución sobre «La guerra en Ucrania y su impacto económico, social y medioambiental». Los miembros expresan su solidaridad con Ucrania y destacan el papel de la sociedad civil en la ayuda al pueblo y a los refugiados ucranianos.
La presidenta, Christa Schweng, abrió el debate subrayando que: Esta invasión ha puesto en peligro nuestra seguridad y nuestros valores y la UE apoya legítima y enérgicamente a Ucrania, respondiendo con unidad y solidaridad». A ello añadió: «La sociedad civil organizada de la UE es uno de los pilares de nuestra democracia, está en la vanguardia para hacer frente a las consecuencias humanitarias, económicas y sociales de la guerra y está mostrando su determinación de ayudar al pueblo ucraniano a defender los valores europeos. Ponemos nuestra solidaridad en acción y nuestro apoyo a Ucrania es inquebrantable.
La comisaria de Asuntos de Interior, Ylva Johansson, destacó el papel sumamente importante que el CESE puede tener con su experiencia sobre el terreno, ya que Europa ha acogido hasta ahora a 3,5 millones de refugiados ucranianos, de los que 1,8 son niños. La solidaridad sin precedentes que las organizaciones de la sociedad civil, la ciudadanía y las autoridades han mostrado con las personas que huyen de la guerra en Ucrania ha sido extraordinaria y nos hace sentirnos orgullosos de ser europeos. Juntos trabajamos mejor,
dijo la Sra. Johansson, e insistió en que Putin está atacando nuestros valores fundamentales y Ucrania los está defendiendo y necesita nuestro apoyo.
Los presidentes de los tres Grupos, ponentes de la Resolución, subrayaron los retos cruciales a los que se enfrenta Europa como consecuencia de la guerra y pidieron a los dirigentes de la UE que tomen medidas, especialmente en relación con la política migratoria, la inflación, el aumento de los precios de la energía, la creación de un sistema alimentario sostenible, la reducción de la dependencia y el desarrollo de la autonomía estratégica y tecnológica de Europa.
Stefano Mallia, presidente del Grupo de Empresarios del CESE, afirmó: En nuestra Resolución celebramos las medidas humanitarias adoptadas hasta la fecha, pero también instamos a los Estados miembros a que hagan más para ayudar a Ucrania, que está en la vanguardia de la lucha por la democracia. En 2013, en la plaza Maidán, los ucranianos buscaban inspiración en Europa, hoy es Europa la que busca inspiración en Ucrania.
Oliver Röpke, presidente del Grupo de Trabajadores, destacó: Uno de mis mensajes principales es que la comunidad internacional y Europa deben permanecer unidas en esta situación. Todos los intentos de Putin de crear divisiones entre nosotros, entre los Estados miembros, deben fracasar. En una guerra como esta, nuestro Comité debe defender ante todo un enfoque humanitario, el apoyo a la sociedad civil y una solución negociada, aunque esto suene poco realista en este momento.
Séamus Boland, presidente del Grupo Diversidad Europa, también afirmó: La invasión rusa de Ucrania representa la mayor y más violenta agresión no provocada en el continente europeo desde 1939 y debemos rechazarla. Debemos denunciar a Putin y debemos siempre buscar la paz.
Los representantes de la sociedad civil ucraniana y rusa que intervinieron en el debate despertaron una gran emoción al relatar sus experiencias de la guerra de primera mano.
El fundador del movimiento «Rusia Abierta», Mijaíl Jodorkovski, señaló las desastrosas consecuencias de la desinformación: Nos hemos reunido como un comité contra la guerra. Todos estamos motivados por el mismo deseo de llevar la información a la ciudadanía rusa.
Intentar combatir la desinformación es nuestra prerrogativa, incluso más allá de Rusia.
El presidente del Consejo Económico y Social Tripartito de Ucrania, Anatoli Kínaj, en un tono emocionado, calificó esta tragedia de crimen contra la civilización, no solo una agresión militar
. Declaró: Tendremos que reconstruir Ucrania, nuestra industria y nuestra economía. Ya estamos trabajando en este sentido y estamos muy agradecidos a nuestros socios europeos por poner en marcha una especie de Plan Marshall para Ucrania.
Alexánder Shubin, presidente de la Plataforma de la Sociedad Civil de Ucrania, pidió a Europa que siga apoyando a Ucrania y sus aspiraciones a formar parte de la familia europea.
Guennadi Chíyikov, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Ucrania, pidió a las organizaciones empresariales y patronales europeas apoyo para las empresas ucranianas.
Por último, Yevguenia Pavlova, de la Asamblea Nacional de Personas con Discapacidad de Ucrania, recordó que no hay que olvidar a la población ucraniana con discapacidad, que es extremadamente vulnerable y necesita especial atención.