El Comité Económico y Social Europeo acoge con satisfacción las recomendaciones de la Comisión sobre la política económica de la zona del euro. Apoya firmemente el paquete de medidas «Next Generation EU» e insta a que se alcancen lo antes posible los acuerdos necesarios al respecto.

No obstante, la recuperación de la crisis de la COVID-19 solo tendrá éxito si va acompañada de una reestructuración de nuestra economía y nuestra sociedad; además, recobrar la confianza es fundamental para estabilizar la demanda. Ello puede lograrse mediante:

• la evolución hacia una gobernanza económica más orientada a la prosperidad y basada en la solidaridad. El CESE insta a que se reanude lo antes posible el proceso de revisión emprendido por la Comisión;
• el aumento de la inversión privada y pública, incorporando una «regla de oro» en materia de inversión pública, con miras a preservar la productividad y una base social y medioambiental para el bienestar de las generaciones futuras. «Esto implica eliminar del cálculo de los indicadores de déficit las inversiones netas», explica la ponente, Judith Vorbach;
• la aplicación del pilar europeo de derechos sociales: entre las iniciativas para una Europa más social figura la propuesta de Directiva sobre unos salarios mínimos adecuados;
• la reforma de las políticas fiscales, mediante el desplazamiento de la carga fiscal desde los impuestos sobre el trabajo hacia bases imponibles menos perjudiciales para la oferta de mano de obra, teniendo también en cuenta el correspondiente efecto distributivo. El CESE pide avances sustanciales en la introducción de nuevos recursos propios, tal como se expone en el plan de recuperación. (na)