El pleno de julio del CESE incluyó un debate con el ministro húngaro de Asuntos de la Unión Europea, János Bóka, que presentó las principales prioridades de la Presidencia húngara del Consejo de la UE. 

Hungría asume la Presidencia rotatoria en un momento delicado para Europa, un momento de transición política dentro de las instituciones y de retos extraordinarios para la Unión. «La Presidencia húngara del Consejo de 2024 llega en un momento de múltiples crisis», declaró el Sr. Bóka. «Estamos asistiendo a una guerra en nuestra vecindad, al declive de la competitividad europea, un aumento de las tensiones en las relaciones comerciales de la UE, retos demográficos, migración incontrolada y una reducción de las perspectivas de los agricultores europeos». 

Después de señalar que el Comité tiene una larga historia de buena colaboración con las Presidencias del Consejo, el presidente del CESE, Oliver Röpke, habló del papel de la institución como guardiana de los valores europeos: «Nuestro Comité se ha comprometido a trabajar estrechamente con la Presidencia húngara para garantizar que la UE adopte medidas sobre lo que los europeos y europeas sienten que son las prioridades más urgentes. Seremos socios inestimables, pero también críticos francos y constructivos. La voz de la sociedad civil es potente y nosotros nos ocuparemos de que se escuche». 

Algunos miembros del CESE expresaron su preocupación por la posición de Hungría sobre la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania, el respeto del Estado de Derecho en la UE y la reducción del espacio para la sociedad civil en Hungría. El Sr. Bóka afirmó que la Presidencia húngara es plenamente consciente de sus responsabilidades y suscribe tanto la posición común de la UE sobre Ucrania como el Estado de Derecho y los valores europeos. La Presidencia húngara ya se ha puesto en contacto con el CESE y ha solicitado diez dictámenes exploratorios. Para más información sobre las actividades del CESE durante la Presidencia húngara, consulte el sitio web del CESE. (mp)