El Pleno del CESE de septiembre acogió a la defensora del pueblo europea Emily O'Reilly, que hizo balance de los temas tratados durante su mandato y expuso sus ideas sobre los retos a los que se enfrenta la administración pública europea y la forma en que deben abordarse. El presidente del CESE, Luca Jahier, destacó la necesidad de que las instituciones de la UE estén orientadas a las personas.

La Sra. O'Reilly señaló que, cuando las instituciones de la UE se enfrentan a una cuestión delicada, la cooperación entre ellas es esencial si se quieren lograr cambios. «Cuando se trata un tema difícil y delicado, la colaboración y una coalición de fuerzas de todas las partes interesadas, desde las instituciones hasta los Estados miembros, siempre es lo que contribuye a cambiar las cosas», afirmó. «Solo vislumbramos los cambios cuando se alcanza cierto nivel de presión, porque el tema pasa a ocupar un lugar más importante en la agenda de las instituciones».

El Sr. Jahier destacó que el Comité es una institución de la UE orientada a los ciudadanos europeos y elogió el papel y el trabajo de la defensora del pueblo europea en este sentido.

«Debemos tener en cuenta que el CESE está constituido por 350 miembros que están en contacto permanente con los ciudadanos sobre el terreno», señaló. «Necesitamos una gobernanza centrada en las personas y estamos convencidos de que el Defensor del Pueblo Europeo tiene un papel crucial que desempeñar para ayudar a las instituciones de la UE a adaptarse a este cambio. Usted ha adoptado una serie de medidas y recomendaciones en este sentido, que el Comité cumple rigurosamente y seguirá cumpliendo en el futuro». (mp)