Entrevista con Jane Morrice
 

miembro del Reino Unido del Grupo Diversidad Europa, experiodista, miembro del CESE de 2006 a 2020, exvicepresidenta de Comunicación del CESE (2013-2015)

Ahora que está a punto de dejar el CESE a causa del Brexit, ¿podría decirnos qué es lo más importante que ha aprendido como miembro del CESE?

Dejo el CESE después de catorce años de servicio a Irlanda del Norte en Europa y de servicio a Europa en Irlanda del Norte, y me apena tener que irme pero me siento feliz por haber pasado tanto tiempo aprendiendo tanto de tanta gente sabia y maravillosa. Los miembros y el personal del CESE de todos los rincones de la UE me han enseñado todo lo que necesito saber sobre el arte del compromiso, el consenso, la comprensión, la tolerancia y el respeto mutuo entre personas que tienen distintos modos de vida a nivel europeo. Esto es lo que ha sustentado la construcción de la UE y lo que ha unido a los pueblos de los veintiocho Estados miembros.

¿Qué mensaje le gustaría enviar a los miembros y al personal del CESE?

Que, pase lo que pase después del Brexit, este sentimiento de unión de la gente, de las personas que constituyen la base y el trabajo real de la sociedad civil, debe seguir impulsando a la UE. Mi único consejo a los que ahora controlan las palancas del poder de la UE es que cambien las tornas y se centren totalmente en las necesidades de los ciudadanos de Europa. La Unión Europea es uno de los mayores logros de la historia moderna, debe encontrar formas de mejorar la participación de sus ciudadanos y ha de convencerles de que su voz siempre será escuchada.

¿Qué desea para Europa en 2020?

Mi esperanza para el futuro es que la UE avance orgullosa a hombros de sus ciudadanos. Como ciudadana británica e irlandesa de Irlanda del Norte, tengo la suerte, gracias al Acuerdo de Paz del Viernes Santo, de seguir siendo ciudadana europea después del Brexit y de poder seguir trabajando para alcanzar ese objetivo. (mp)